Me encanta que me abraces,
porque abres, despacito, los cerrojos de mi alma…
Me embelesa tu voz, dulce y pausada,
y me pierdo en el verde transparente de tu mirada…
Pero se enturbian las aguas, cuando pienso que mañana
este “instante” se habrá ido
y será solo un recuerdo camino del Olvido…
Y no volverá, porque agua pasada no mueve molino
…y porque ¿sabes qué?... ni tú ni yo seremos los mismos….
Pero, si sientes lo mismo que yo, quédate conmigo,
hagamos ,de este “ahora y aquí”, un instante infinito…
Porque , ¿Sabes qué?...
Te quiero y te necesito, para compartir mi vida contigo,
¡para sentirme vivo..!
Para Maribel, de Isidro.
Abril de 2019